Opiniones del B&B Il Giardino Segreto

La tranquilidad de la zona

Su situacion , poco lejos del centro

El desayuno con las vistas

Habia un charco en l habitacion

El entorno y la terraza del desayuno. Esta algo alejado del puerto pero es un sitio ideal para iniciar la subida al Stromboli

El desayuno muy muy flojo y algunas cosas deberían renovarlas, como las toallas o las sábanas que tienen mucho tiempo y se ven muy usadas.

El baño estaba limpio.

MALA RELACIÓN CALIDAD-PRECIO Éramos 4 personas y dormimos en una cabaña de madera con una cama doble y una litera. Soy consciente de la poca oferta hotelera de la isla y que los precios son altos. Pero es muy caro este alojamiento para lo que ofrece: -Colchones MUY incómodos y viejos. Almohadas finísimas. -Sábanas muy viejas y toallas aún más. Muy deteriorados los textiles en general. -Pusieron medio rollo de papel higiénico en el baño y éramos 4 personas. -No hay ningún tipo de armario. -El desayuno consistía en pan con mantequilla, mermelada y galletas. Café horrible. Zumo artificial. En conclusión: no repetiríamos. No entiendo la nota de un 8,4, sinceramente.

La ubicación tiene buenas vistas. No hay ruidos, muy tranquilo.

La ubicación está alejada del centro, y todo cuesta arriba. Muy incómodo si se va con maletas. El exterior del alojamiento parce destartalado, fachada en bruto como de obra sin pintar. Las sábanas y toallas, asperas y muy usadas. Mobiliario viejo y descuidado. El desayuno muy justo y limitado, sin variedad. Difícil localizar al anfitrión.

Para llegar tienes que subir 100 metros cuesta arriba, pues está ubicado al inicio de la subida al Stromboli. Al lado hay una empresa para contratar la visita al volcán. El desayuno es magnífico, que se sirve en terraza con vistas al mar.

Faltaría poner en la entrada información de contacto para poder avisar a la persona encargada, y así hacer el check-in más rápidamente.

Lugar con encanto rodeado de jardin, con terracita. Por la noche se disfruta estar en un paraje silencioso y tranquilo. Agradecer q como marchabamos antes de las 7h de la mañana nos dejaran el desayuno take away. El trato amable.

Como otras opiniones q he leido creo q deberian invertir en nuevas toallas ya q son muy muy viejas. Las sabanas bien aunque si renuevan se agradecera sean blancas q da mas sensacion de limpio y no estampadas como las actuales. La ubicacion algo lejos, y de subida por lo q en verano con la calor es pesadito el paseo. En nuestro alojamiento no habia o no funcionaba el agua caliente ni el aire acondicionado aunque habia ventilador q fue suficiente y no pasamos calor.

Comodo y amplio, muy amables

Un poco alejado del centro y del puerto, cuesta arriba, no ofrecieron servicio de transporte

las vistas de la terraza del desayuno y la terracita del apartamento muy acogedora

los jardines muy bonitos pero había mosquitos

El desayuno en la terraza, de calidad y abundante, la amabilidad de Valentina.

Las toallas extremadamente viejas, las sábanas desgastadas pero algo mejor que las toallas. El aire acondicionado no tenía potencia suficiente, sobre todo las personas que duermen en la litera pasaron calor. La ubicación, lejos de la playa y del centro del pueblo (mínimo 15 minutos caminando) y en lo alto de una loma (cuesta), último tramo carretera de tierra y piedras (ojo maletas). Tener que pagar por fuera de booking y que no les funcionara el datáfono para el pago final. El sillón de la habitación viejo y roto.

El desayuno estaba muy bien con unas vistas preciosas.

El hotel está un poco alejado pero en 15-20 minutos estas en el puerto de Stromboli. La habitación estaba bien pero se notaba un poco vieja. El baño también viejo pero todo tenía mucho encanto.

Agradable

La relación calidad precio está demasiado desproporcionada.

Está ubicado justo al lado de la empresa con la que hicimos el trecking al volcán. El personal es muy amable y el desayuno viendo el volcán y el mar no tiene precio y estaba muy rico. Por 10 euros trayecto te llevan al puerto y te recogen también. Toda una experiencia.

Si buscas ir a la playa, está algo más alejado. Nosotras veníamos a hacer la visita al volcán.

Faltaban persianas en algunas ventanas, por lo que al amanecer entraba la luz

El propietario no nos facilito el checking No pudimos pagar con tarjeta le tuvimos que pedir recibo, si no, no lo proporcionaba. Salimos temprano y no nos quiso dar desayuno antes de la hora que el marcó, a pesar de estar incluido en el precio. Las sábanas y las camas de mala calidad No lo recomiendo

La terraza del desayuno en alto con vistas al mar y al volcán

Era una cabaña sin aislar (pasamos mucho frío) muy vieja y con falta de limpieza.. Cama muy blanda.

Un sitio precioso, sobre todo por el jardín, que tiene mucho encanto. Es muy silencioso y las habitaciones (al menos la mía) tienen una terraza muy espaciosa con mesa y sillas dando al jardín. El personal muy amable y no se oye ni un ruido en la noche. El desayuno correcto, servido en una terraza con unas vistas preciosas. El hotel está en la parte alta del pueblo, recomiendo coger un taxi al menos a la llegada, sobre todo si lleváis peso. No está muy lejos, es un paseo de unos 15/20 min desde el puerto, cuesta arriba pero fácil de hacer. Pero las calles son muy estrechas y cuando no lo conoces puede ser complicado llegar a pie con las maletas. El taxi me costó 10€.

Una pena que el colchón es muy antiguo y se duerme mal. En el baño no hay toalleros, ni estantes en la ducha. Lo de las toallas es incómodo porque no hay donde dejarlas húmedas.

El sitio es muy bonito, el jardín, tiene cocina dentro de la habitación

Luca es muy amable. Nos acogio fenomenal. El sitio es a maravilloso rodeado de cítricos. El desayuno es muy abundante y bueno.

Nos avisaron de que tuvieron un problema con la habitación que habíamos reservado y solo nos podían ofrecer una con 2 camas. Pedimos un colchón extra pero no nos lo pudieron ofrecer. Las sábanas no son blancas con lo que no se aprecia si están limpias. Las mantas y toallas estaban rotas .

Relación calidad precio muy buena