Opiniones del Apartmaji Pri Kokolu 3 estrellas

Nos recibió un chico súper amable. Nos tenía preparados unos pasteles típicos y además nos ofreció café, que preparó especialmente en el momento. El sitio era súper espacioso y cómodo. Además tenía una terraza techada en la entrada, que nos vino genial porque llovió bastante. La ubicación también es buenísima y se puede ir andando al lago bled. Tiene parking dentro del establecimiento. Muy recomendable!!!

El apartamento está bien, no dispone de salón, solo una habitación y cocina con mesa, pero merece mucho la pena.

Todo es correcto

La ubicación, puedes llegar al lago caminando, aparcando en el alojamiento. No cobran por los perros.

Las habitaciones son justitas, almenos la que nos tocó y se ven un poco antiguas, pero son funcionales con cocina.

Cerca del lago, a 5-10 minutos a pie. Nejc muy amable, nos dió la bienvenida personalmente acompañado de un café y algunas indicaciones sobre la ciudad.

El recibimiento estupendo, Nerg fue encantador y nos recibió con el pastel típico de Bled . Los apartamentos están fenomenal y tienen de todo, también disponible lavadora con jabón. La localización excelente, vas andando a todas partes y estás al lado del bus lanzadera para ir a la garganta de Vintgar.

Nejc nos recibió muy bien, nos obsequio con un dulce típico de Bled. La ubicación y la facilidad de entrar y salir del pueblo, además el aparcamiento facilita mucho las cosas. Nuestro apartamento tenía dos baños y para un grupo de 7 personas era un punto a favor, la cocina comedor era bastante grande con una gran mesa. Y el lugar era muy tranquilo, no está en el centro del pueblo donde hay más ruido pero, tiene una tienda cerca, una lavandería y el restaurante Rustika que nos encantó y andando se tardan 5 minutos en ir al lago.

Muebles un poco antiguos y usados, las almohadas eran muy finas e incómodas pero pedí algunas más y sin problema nos las dieron.

La atención de los propietarios, atentos en todo momento y nos permitieron hacer el check in antes y tuvieron el detalle de invitarnos a un licor típico de la zona y pastel, también nos dieron recomendaciones del lugar. Recomendable totalmente.

Nada, todo muy bien.

Nejc es un anfitrión espectacular. Te recibe con café y el dulce típico de la región (kremšnita). Te da recomendaciones de que visitar, donde comer, y está dispuesto a explicarte cualquier cosa que necesites. En el apartamento tienes lo básico que puedes necesitar para tu estancia.

Únicamente no había gel de baño ni champú, pero nos apañamos con el gel de manos.

El anfitrion muy amable, nos dio muy buenos consejos e incluso nos recibió con una cerveza y pastel típico de la zona. La habitación era espaciosa, muy limpia y cuidada. Camas cómodas también. Además la situación es magnífica porque estás a 10 min del lago bled andando y tienes un súper y restaursntes cerca. Tiene parking también para dejar el coche, cosa que se agradece al estar tan bien situado.

Por poner una pega, la habitación estaba en una primera planta sin ascensor y las escaleras eran algo empinadas para subir y bajar grandes maletas. Eso sí, el dueño se ofreció a ayudarnos con las maletas.

Desde que llegamos todo fueron facilidades: aparcamos en el parking gratuito, nos invitaron a la tarta típica de Bled, nos explicaron con mapas todo lo que podíamos hacer en la zona, acogieron a nuestra perra con cariño y fueron realmente amables. El apartamento muy amplio y con todo lo necesario. Zona muy tranquila, descansamos de 10. En pocos minutos andando estás en el lago o en el castillo. El día de salida nos dejaron dejar el coche aparcado lo que necesitásemos, sin prisas.

La ubicación era excepcional, cerca de todo en 4 min en el lago y en menos de un super o restaurante. El anfitrión, una persona increíble nos ayudó en todo lo que necesitamos y pendiente. Nos recibió con un pastel café y licor. Nejc una persona maravillosa. Gracias por todo

La ubicación es muy buena, a poco más de 5 minutos del lago y cerca de un supermercado y varios restaurantes. La habitación es muy grande y las señoras que nos dieron la bienvenida son un amor: te vienen con un trozo de la tarta típica de Bled, un café y un chupito de licor de manzana. Además la habitación cuenta con una minineverita (silenciosa!), un par de tazas y vasos.

Por poner una pega, la ducha sale con poca presión y al regularla te pasas de agua fria a agua hirviendo rápidamente.

Los anfitriones muy amables. Trato excelente

Era muy espacioso y tenía de todo, el propietario nos recibió con pastel y locos típico de la zona y nos recomendó diferentes sitios para visitar, se portó muy bien y estuvo dispuesto a todo.

En general me gusto el trato de los encargados, la ubicación y las instalaciones. El alojamiento es en una casa clásica. La habitación a modo de pequeño apartamento tiene todo lo necesario.

Me ofrecieron guardar mi motocicleta a cubierto y acordamos un espacio. Cuando llegue tras un paseo estaba ocupada por otras tres motocicletas, por lo que difícilmente cabía la mía. Es cierto que se ofrecieron a adecuar el espacio, pero me pareció inviable y lo rechacé. Creo que no deberían poner al cliente en esa tesitura, si se ofrece algo hay que mantenerlo y evitar la incomodidad al cliente de verse olvidado a las primeras de cambio. Deberían haber indicado a los nuevos clientes que ese espacio ya estaba ocupado y lo dejaran libre,

La amabilidad de la dueña, Mojca. Nos recibió con un dulce típico y un vasito de licor Estuvo disponible siempre para cualquier cosa que necesitáramos. La ubicación del apartamento era perfecta; a cinco minutos andando del centro y del lago. Había sitio para aparcar gratis en la propia casa. En el resto del pueblo es muy caro el aparcamiento

No había persianas y los estores que había instalados en las ventanas dejaban pasar demasiada luz. Debe ser así por aquí, pero no estamos acostumbrados y necesitamos oscuridad para dormir. En Eslovenia amanece muy pronto en junio (a las 5:45 de la mañana ya habia sol) y eso a algunos nos despierta.

La dueña era simpática y nos dejó usar la lavadora durante la estadía. No sólo el castillo y el lago está cerca, hay supermercado y restaurantes alrededor.

Fue una estancia perfecta, el trato insuperable. Nos recibieron con una tarta típica y café,  lo que se  agradece. El apartamento limpio y con todo lo necesario en la cocina. Nos facilitaron la entrada antes de la hora, ya que el apartamento estaba preparado y tambien pudimos dejar las maletas luego del check-out. Está muy bien ubicado a 5 min del Lago Bled. Nos recomendó rutas para hacer cada día que nos encantaron. Sin duda, repetiría y recomendaría.

La amabilidad del personal, Mojsa nos recibió con un riquísimo pastel típico de Bled, un café y una botella de licor. Estuvo muy atenta en todo momento a nuestros requerimientos. Hay una lavadora comunitaria, con detergente disponible y tendedero lo cual nos vino muy bien. La habitación es amplia con nevera y hervidor, aunque quizás necesite una leve remodelación. Está situada a 5 minutos andando del lago.